ALCALDE DE VÍÑAC MÁS FUERTE QUE NUNCA

Hace un mes se difundió la noticia al Perú, Yauyos y Lima, que el alcalde de Víñac, el Sr. Teodardo Carrión Huamán, había sido detenido por orden de la Fiscalía Provincial de Yauyos, por los delitos de Peculado Agravado, enriquecimiento ilícito con las donaciones y otros más. La noticia recorrió como un reguero de pólvora por todo el ámbito de nuestra provincia; nos sentíamos incrédulos ante este informe que remeció los cimientos de la colonia viñaquina y de toda la Zona Sur de Yauyos, pero resultó, ser falso de toda falsedad. Según manifiestan la noticia se esparció de la ciudad de Cañete por algunos interesados y con fines nada santo.Lo entrevistamos con el alcalde de Víñac, cómodamente sentado en su sillón, quien no dijo, quienes urdieron esta noticia fueron los siempre enemigos de Víñac y del Municipio, quienes se creen ser dueños del pueblo y chantajean al alcalde, como lo hacía con los anteriores, con el fin de recibir dinero y dejarlos tranquilos. Ellos no saben, que el alcalde se formó en la Escuela de Víñac y toda su Educación Secundaria en el otrora Colegio Nacional “Santiago de Víñac”, está unido en pensamiento y sentimientos con el distrito, porque allí están puestas todas sus ilusiones. Eso no lo perdonan sus enemigos de turno, entre ellos su Teniente Alcalde, en contubernio con el Gobernador Obed Curi Cambillo, que nada bueno hace por el pueblo y el grupo de regidores de su misma bancada y grupo político.Manifiesta que Andrés Constantino Zenteno Rivera, teniente alcalde y los demás regidores opositores, se reunieron en la ciudad de Cañete en compañía del Gobernador, para denunciarlos ante la Fiscalía, mintiéndoles que el Concejo había almacenado ropas, medicinas, comestibles y otras objetos que fueron donados por el Gobierno Central, por Caritas y otras instituciones benéficas con motivo del terremoto que asoló el 15 de agosto del 2007; pero que todas estos objetos estaba en muy malas condiciones, rotos, agujerados, sería ofensivo distribuir a la familia necesitada de Víñac; por ese motivo lo tenía almacenados en uno de los cuartos del Centro Cívico, listos para incinerados. De eso se valieron los enemigos, calumniarlos y denunciarlos ante la Fiscalía, que se llevó a Yauyos, todos estos objetos, para ser inventario y verificar el mal de la donaciones.En la Cañete, expresa el alcalde, todos celebraron la detención del alcalde con una Pachamanca, libaron licores hasta altas horas de la noche, inclusive se distribuyeron los cargos, quienes iban a ocupar de Gerente Municipal, tesorero, de secretario, etc, etc,. Le preguntamos, porqué la gente de su misma bancada, ahora están en la oposición, dice porque la mayoría se ilusionaron, que llegando al poder, deseaban ganar más de mil soles por dieta, pero los pocos recursos del Concejo Municipal no está para estos gastos. El único que aceptó de buena gana fue el regidor Alfredo Ordóñez Mendoza, dice que cuando se quiere trabajar por el bien y el progreso del pueblo no se debe percibir por dos sesiones de concejo, más de mil soles. Esto es inaceptable e incongruente con nuestros pueblos que se debaten en el abandono, sin una plaza de armas, un buen Centro de Salud, ni una Municipalidad, con el templo de “Santiago de Víñac” convertido en escombros.El alcalde, se siente confiado que ellos recapacitarán y seguirán trabajando por el pueblo. Claro está que candidatos los “perdedores” de las elecciones son los que aguijonean a los tontos útiles para crear zozobra y malestar en el pueblo. No los perdona que un neófito le haya ganado. Hubo un alcalde que se formó en el “Santiago de Víñac” una vez en el cargo se creó un pequeño Dios, como decía nuestro gran Cervantes:”de cuyo nombre no quiero acordarme”, cuando los residentes de Lima, les pidió que explicara los gastos que estaba haciendo, éste todo poderoso y ufano dijo que lo haría a su Comunidad, porque ellos lo habían elegido y no los de Lima, al final no rindió cuenta ni a la Comunidad, ni al pueblo. Fue denunciado por el alcalde que le sucedió y tuvo que pagar por su majadería ante el Poder Judicial.